Jump to content
-- Donaciones y sistema VIP -- ×
OPOSICIONES PARA STAFF: MAS INFO AQUÍ ×

Bubble1

Miembro con invitación
  • Contenido

    1
  • Ingreso

  • Última visita

1 Seguidor

Información personal

  • Nombre del personaje
    Carla Suárez

Visitantes recientes al perfil

381 visitas al perfil
  1. Nombre: Carla Suárez Fecha de nacimiento: 20/08/1987 (32 años) Experiencia previa en el rol: No tengo experiencia, porque es muy difícil encontrar un servidor de rol serio - Historia - Carla nació en el año 1994 en España, concretamente en Zaragoza. Nació en el seno de una familia poco acomodada, pero sus padres luchaban cada día para que a su pequeña no le faltase de nada. Su padre, Marcos, era un camarero que se pasaba más horas en un bar sin parar de trabajar que en su propia casa, se iba a trabajar cuando Carla aún dormía y cuando volvía de trabajar Carla ya estaba en la cama, pero los lunes cuando libraba se desvivía por su princesa. Muchas veces Marcos se arrepentía del trabajo que tenía, de no poder ver más a su pequeña, pero luego vivía esos lunes y todo valía la pena. Sara, su madre, era ama de casa y se encargaba durante todo el día de la pequeña Carla. 4 años después nació su hermano pequeño, Pablo. Para Carla en un principio fue un choque bastante grande ya que pasó de ser la princesa de la casa a ser la hermana mayor, aunque después de un tiempo su hermano se convirtió en un pilar esencial de su vida. Su infancia fue normal, arropada por su familia, querida y amada, pero todo se empezó a torcer cuando llegó la adolescencia. Carla siempre tuvo una vena rebelde, aunque todo el mundo decía que tenía cara de ángel y de buena niña, a ella le gustaba liarla e ir siempre contra corriente. A medida que iba sacando cursos en el instituto iba haciendo más amistades que podrían considerarse poco recomendables para una niña de su edad, amistades que la introdujeron en el mundo de las fiestas clandestinas, botellones y carreras ilegales. Se pasaba las tardes fumando y bebiendo con sus amigos, descuidando sus labores estudiantiles y separándose cada vez más de sus padres hacia lo que quería cuando quería. Repitió 4ºESO y, aunque sus padres intentaban ayudarla en todo lo que podían, cada vez la daban más por perdida. Con 18 años, en una de las tantas fiestas a las que iba, conoció a Alberto, era un chico que supo llevarla, supo escucharla y supo comprenderla. Parecía que Alberto había llegado para sacarla de toda la mierda en la que ella sola se había metido. Era un chico estudiante de clase alta, estudiaba segundo de bachillerato en uno de los institutos privados de la ciudad, quería ser abogado igual que su padre, conducía una moto con la que prometió llevar a Carla al fin del mundo. Carla se enamoró de su caballero de brillante armadura al poco tiempo y empezaron a salir casi inmediatamente, se convirtieron en la pareja que todos querían ser, iban de fiesta en fiesta casi fardando de la pareja idílica que hacían. Los padres de Carla veían a Alberto como el novio perfecto para su hija, lo trataban como a uno más de la familia, era el idóneo. Los años pasaron y la relación seguía siendo igual de perfecta por lo que decidieron, con 22 años cada uno, irse a vivir juntos. Cogieron un piso y él se puso a trabajar en el bufete de abogados donde trabajaba su padre y, en unos meses, consiguieron acomodarse sin pensar mucho en las deudas y problemas que pudiesen venir. Carla estaba viviendo el sueño de toda chica, vivía bien, tenía al hombre de su vida al lado, todo era perfecto. Cuando llevaban un año viviendo juntos todo empezó a cambiar. Él se volvió más controlador, no dejaba a Carla trabajar ya que decía que él debía trabajar y ella debía cuidar de la casa, era su deber como mujer. Sus padres la decían que ella no trabajaba y él sí, por lo que debía darle las gracias y hacer lo que decía él. Un día sucedió la primera paliza. Carla tuvo un día malo y se quedó dormida por la tarde, lo que provocó que cuando él volvió de trabajar la casa no estaba fregada y él se cabreó. Le pidió perdón, pero él ya estaba transformado en su peor pesadilla. Su caballero de brillante armadura se había convertido en una bestia. Al día siguiente él le trajo una base de maquillaje para que se maquillase y no dijese nada, le explicó que era su culpa ya que él se partía la espalda trabajando para que al menos, al llegar a casa hubiese un plato de comida en la mesa y la casa estuviese en perfectas condiciones. Un día después de la paliza semanal, Pablo se presentó en su casa sin avisar por lo que vio a su hermana con el ojo morado y el labio partido. Obviamente su hermano quiso matar a Alberto, pero Carla no se lo permitió por lo que prometió a su hermano que le denunciaría, cosa que no llegó a hacer. El día que todo reventó fue un día que Alberto llegó a casa borracho y, al ver a Carla en el sofá la tomó con ella. Pablo tuvo una sensación rara y se fue a ver a su hermana, encontrándosela en el suelo del salón inconsciente y tumbada en un charco de sangre por lo que la cogió, la metió en el coche y la llevó al hospital más cercano. Carla despertó viendo a su hermano pequeño mirarla casi llorando, en ese momento supo que debía de hacer algo. Llama a la policía que lo voy a denunciar. La cara de Pablo cambió a algo de esperanza. Llamaron a la policía y Carla lo denunció y, al tener un parte de lesiones bastante importante, todo el proceso se aligeró. Después de un año de juicios lo condenaron a pasar un tiempo en la cárcel. Carla aún tiene pesadillas con los gritos de Alberto saliendo del juzgado diciendo “cuando salga te voy a matar, escóndete bien porque cuando salga de la cárcel te vas a ver en una cuneta”. La mirada de Alberto nunca se le olvidará. Los años pasaron y Carla se recuperó con mucha ayuda sobre todo de su hermano, se convirtió en la persona más importante de su vida. En el cumpleaños número 26 de Carla le llegó una notificación de que Alberto iba a salir en un par de semanas a la calle, ya había cumplido su tiempo en la cárcel. Carla tuvo pánico, pero en parte se sentía segura ya que habían pasado muchos años y pensaba que él ya se habría olvidado de ella. Fue un error ya que al día siguiente una carta pasó por debajo de la puerta. Era Alberto diciendo que sabía dónde vivía y que, cuando menos se lo esperase, iría a por ella. Lo primero que hizo fue llamar a Pablo para contarle lo sucedido y este prometió que al día siguiente iría a verla. Pablo cumplió y el día siguiente se presentó en casa de Carla con un billete de avión a Los Santos, solo de ida. Eres mi hermana mayor y te voy a proteger como sea y si eso implica alejarte de mí para que ese desgraciado ni te vea, lo voy a hacer. Cuídate y no te olvides de llamarme. Te quiero, hermanita. Esas fueron las últimas palabras que oyó decir a Pablo ya que se fue. Carla hizo la maleta y se fue al aeropuerto cogiendo el avión para irse buscando una vida nueva en una nueva ciudad. Aspecto físico - Morena. Con ojos oscuros. Cara angelical. Complexión delgada. Tatuada. - Personalidad - Carla es una mujer muy desconfiada sobretodo con los hombres por todo lo que ha vivido, a primeras puede parecer una persona borde; pero a medida que la vas conociendo te das cuenta que tiene un corazón que no le cabe en el pecho. Es la amiga con la que cualquier persona soñaría, ya que se desvive por sus amigos. - Aspiraciones - Rehacer su vida, en una ciudad que no la conoce nadie. Encontrar a gente que la entienda y la quiera por lo que es. Tener un trabajo digno. Tener una familia. - Miedos - A enamorarse. A que le hagan daño. A la soledad.
×
×
  • Crear nuevo...