Invitación - Stillone

[StelloneTM]

INVITACIÓN

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MI NOMBRE: StelloneTM (Estela One)

ID: 13207

INVITACIÓN PARA: @Stillone

 

MOTIVO:  Quería dar mi invitación a mi pareja con la que llevamos 12 años de relación. Es profesor y actor de doblaje, además de sobre todo, llevar roleando toda la vida desde bien chaval desde rol de mesa hasta practicar GTAV de cara a poder entrar aquí. Lleva estudiando tanto las normas como el cómo funciona server desde hace mucho para hacerlo lo mejor posible (podía haber mandado la invitación antes, pero él quería saber primero todo lo posible. Además se espera un rol tanto entretenido con el que curiosamente en principio no debería cruzarse con el mío salvo para lo básico, así que puede traer nuevas historias a esta maravillosa isla.

 

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[tecNO!]

          MADRINA APTA         

 

Recuerda @StelloneTM que en el caso de que tu APADRINADO pasase la WHITELIST, eres la encargada de guiarlo en el servidor durante al menos dos semanas, como recoge la normativa.

 

El usuario @Stillone ya puede publicar su historia.

[Stillone]

Nombre y Apellido que vayas a usar ingame: Edmon Mitman

Edad y fecha de nacimiento (REAL): 04/08/1990 - 29 años.

Experiencia previa en roleplay: 2 años jugando rol de mesa D&D, Mutant Chronicles y La llamada de C'thulhu. 1 jugando en los servidores de Roleplay de warcraft. 
En GTA casí medio año, casi todo el rol en servidores sin whitelist a excepción de mancosRP (primer servidor con white) y Malviviendo (en el que me encuentro actualmente).

Historia completa de tu personaje (cómo lo interpretarás, procedencia, qué pretende ser, aspiraciones, miedos etc...): 

                                                                                                    HOSPITAL PISQUIÁTRICO DE NORTHWEST TENNESSEE
HISTORIA CLÍNICA PSIQUIÁTRICA
Ficha de identificación.

Nombre: Edmon Mitman. Sexo: Masculino. Edad: 55 años.
Lugar y fecha de nacimiento: 25 de septiembre de 1964. 300 Climer Loop, Alamo, TN 38001, EE. UU.
Raza: Blanco.  Religión: Católica (no practicante) Ocupación: Desempleado. 
Ocupación anterior: Mecánico, soldador.
Domicilio: 221 Aaron Dr, Alamo, Tennessee 38001, EE. UU. Tel: Desconocido.
Responsable: Phill Morgan Murray.     Relación: Celador Psiquiátrico.
Quien lo canaliza: Baptist Memorial Hospital Tipton. Edo civil: Viudo.
Tipo de Interrogatorio: Directo.

Motivo de la consulta:
Paciente masculino de 55 años que es referido de Baptist Memorial Hospital Tripton, por presentar heteroagresividad inducida por una perdida de habilidades sociales y sentido de la orientación.
Padecimiento actual:
Inició su padecimiento actual hace 5 años, cuando su mujer Margaret falleció debido a una herida en la región temporal-parietal derecha, producida por el impacto de disparos de bala.
Dicha herida, tiene lugar en la tienda local "Abbeys" donde el lunes 14 de Julio de 2014 Tod Smith procede a realizar un secuestro, terminando este en un tiroteo en el que Margaret es herida de carácter mortal según informes policiales, debido al fuego cruzado en el que al mismo tiempo, dos agentes y el propio Tod fueron heridos de gravedad, falleciendo este ultimo en su traslado de urgencia al hospital.
Tras este suceso el paciente presento un cuadro depresivo con síntomas de tristeza, anhedonia, aislamiento y adinamia, por el que acude al servicio de Psiquiatría en el Baptist Memorial Hospital Tipton y se le inicia un tratamiento anti-psicótico (Risperidona 4mg/día por 15 días) presentó una mejoría parcial pero presentó una pérdida de conciencia por efecto adverso al medicamento. Le ocurrió al estar en una alberca y requirió maniobras de resucitación por aproximadamente  5 minutos. Posteriormente despertó con una mascarilla para O2. El paciente estuvo hospitalizado por tres días donde se le tomó un EEG que a decir del paciente estaba normal. Desde entonces ha tomado distintos tratamientos como Quetiapina, olanzapina, fluoxetina, lorazepam, risperidona y midazolam, son los que el paciente recuerda. Todos los ha suspendido por efectos adversos pero no especifica cuales fueron, aunque tuvo mejoría con estos.

El paciente se encontraba consciente en todo momento y se le pidió una historia sobre su pasado para comprobar cualquier posible indicio que pudiese mostrar alteraciones neurológicas en el hipocampo. El Dr. Martins se encargo de transcribir las palabras del paciente a expensas de comprobar la veracidad de sus datos.

Declaración del paciente:
Mi nombre es Edmon Mitman, tengo 55, nací en el antiguo hospital de Climer Loop, en Alamo, Tennesse, creo que ahora lo han convertido en una clínica de rehabilitación, me alegro mucho por quienes realmente puedan llegar a vivir esa experiencia.
Sus compañeros han insistido en que hable de mi infancia así que tratare de no hacerle perder tiempo en el proceso joven. 

Nací sano como un roble, dos kilos y medio señor mio, un chico en buena forma, sin problemas de salud. Un parto normal, sin complicaciones en un día como otro cualquiera en Alamo. 
Mi infancia fue bastante dura, lo que cabría esperar en un pequeño pueblo del condado de Crockett. Mi madre, la señora Bella Mitman, había cambiado su apellido hace apenas unos meses al casarse con mi padre Robert Mitman. Eran padres simples, ejemplares, cariñosos y sobretodo humildes, que vivían al día disfrutando de esos pequeños placeres que hoy por hoy la gente ya no sabría entender. No contábamos con muchos recursos, pero siempre suplimos todas nuestras carencias materiales con amor y paciencia. 
A la edad de cinco años me fui a mi primer día de pesca, padre e hijo, hasta ese momento mis padres siempre se ocuparon de estar cerca de mi, nunca me falto tiempo a su lado, ni alguien con quien jugar, ni quien me curase los rasguños. Fue... la etapa más tranquila y feliz de mi vida.
Recuerdo aquel atardecer de otoño, en el que las hojas caían mientras nosotros abandonábamos el pueblo camino a Tims Ford Lake. Mi padre, me puso una mano en el hombro mientras conducía la vieja Ford pick up del 45 y viajamos riendo, hablando de chicas, de los deberes y responsabilidades de un hombre, y, del tipo de persona en la que me convertiría dentro de poco tiempo. 
Como ya dije, mi padre era un buen hombre, simple y sincero, sin grandes aspiraciones salvo las de un padre de familia que quiere ver crecer a su hijo sano, fuerte y convertirse en un ciudadano de provecho. Fue un momento divertido, mi padre tenia una forma muy exagerada de hablar, movía sus brazos siempre que tenia oportunidad de un lado y a otro y trataba de hacer que con sus gestos pudieses imaginarte aquello de lo que hablaba. Su voz era muy dura y sobrecogedora mientras que la de mi madre era más dulce y cálida. Cuando ella te hablaba era casi como una caricia de amor y comprensión infinita. 
Quizás esa sea la razón de que hoy por hoy a veces parezca un gato afónico hablando, igual mi voz se ha hecho a ese recuerdo y por ello la detesto.
Robert era mi padre, y, mi héroe, pero los héroes.. no son invencibles. He aquí cuando ante mis ojos, tres años más tarde, en el verano del 72 mi héroe no pudo vencer a ese gilipollas, que tras perder a su mujer por dedicarle más tiempo al juego y al alcohol, se durmió al volante tras haber bebido durante 3 horas en el local de Henry dos calles más abajo. 
Recuerdo el día, frió... aun para ser verano. Recuerdo las manillas del reloj de bolsillo de mi padre. Las recuerdo porque, aun después de proceder al ritual en el que daba cuerda al reloj durante 45 segundos, estas habían decidido pararse a las seis y media de la tarde. 
Lo recuerdo, porque fue la primera vez en mi vida en la que pude ver... miedo en el rostro de mi padre... Lo recuerdo, por los gritos desconsolados de mi madre mientras todo a nuestro alrededor guardaba silencio.
Aquel día perdí algo incalculable en mi vida, un pilar, un maestro, un guía, un padre... 

Mi madre y yo tuvimos que seguir con nuestras vidas, fue duro, pero la comunidad nos ayudo y tras el incidente el día a día aunque duro y a veces asfixiante, se hacía más llevadero. 
Pase el resto de mi infancia de aquí para allá, sufriendo sin la presencia de mi padre, viendo como mi madre se esforzaba como solo una madre es capaz, para darme el cariño de dos, cuando solo quedaba ella. Recorriendo las calles para ayudarla, recordando las palabras de mi héroe y tratando de hacer que todo el mundo se sintiera orgulloso del legado de Robert Mitman. 
En el colegio, sin embargo las cosas eran distintas. Los niños no entienden la perdida como los que ya han sido golpeados por ella. Para aquellos pequeños demonios la ausencia de mi padre era la excusa perfecta para hacer leña del árbol caído. 
Y como grandes leñadores Noruegos, hincaron en mi sus hachas más afiladas. Todo árbol puede aguantar los embistes del acero durante un tiempo, pero por dura que sea su corteza terminan cayendo y, yo... ni siquiera era un árbol.
No fue fácil, no fue una niñez de cinco estrellas, porque cuando la muerte se acerca a tu vida tan pronto, dejas de ver el mundo de la misma manera. No fui feliz durante ese tiempo, tampoco un desgraciado, porque en aquella marea de mierda que me arrastraba como un tronco hueco... apareció ella, Margaret Peyton. 

¿Cree usted en la existencia de los ángeles? No estoy loco, pero si no existen, Margaret hubiera sido su encarnación más real. Apareció en mi vida como un torbellino de esperanza que me salvo de todo y me dio una razón para volver a sentir el latir de mi corazón. 
Estuvo ahí para curar mis herida al defender el apellido Mitman contra Zack en los recreativos de Tom. Su mano, agarraba la mía, cuando mi madre me abrazo llorando de felicidad al ver esa chispa en mis ojos una vez más.
Sus labios... cálidos, esponjosos y suaves como la seda fueron los primeros que mi boca pudo probar. 
Créame cuando le digo doctor, que si hay un mundo, el mio era ella.

Gracias a ella conseguí graduarme, viendo a una madre llorar orgullosa de su hijo. Recordando al bueno de mi padre, a mi lado, posando su mano sobre mi hombro, expectante y sonriente. 
Gracias a ella conseguí escupir en la cara a todos los que un día me hicieron daño. Gracias a ella volé.
De esto ya hace más de 37 años... 
Tras graduarme encontré trabajo en el taller del viejo Mike, donde aprendí a soldar y trabajar el metal para pequeñas reparaciones en las granjas locales. No ganaba mucho, pero era un trabajo honrado, en un lugar en el que me encontraba bien y con un viejo loco al que alguna vez le podías escuchar contar batallitas sobre la segunda guerra mundial y su aportación como paracaidista de élite. "Viejo chiflado".
Mientras tanto Margaret ayudaba a mi madre con las tareas del hogar y en tanto nos traía al taller unos de los mejores cafés que jamas habrás probado en tu vida. 

Una rutina tranquila que se mantuvo durante un par de años... hasta que mi madre enfermo. Tras la muerte de mi padre, trabajar sin cesar para que su hijo pudiese seguir sonriendo le costaron muy caro. 
Sin que yo lo supiera mi madre trabaja en el único centro medico de el pueblo donde se trataban pacientes con tuberculosis. 
Su jefe el señor Harold era un déspota, racano y vil que no fue capaz de gastar un cuarto de dolar más en una equipación más segura para sus empleados, su miserable ahorro para prostitutas le costo la vida a cinco enfermeras, todas ellas del pueblo, entre las que se encontraba mi madre.
Apenas pude llegar a despedirme de ella, Margaret se encontraba incluso peor que yo, dado que no permitieron que me acompañase por miedo al contagio de una de las enfermedades más mortales del mundo, transmitida por aire.
Mire a la persona que me habia dado la vida, la mujer que durante los últimos diez años había dado su aliento por mi, hasta el punto de entregarme su vida, para verme sonreír. Su cara, pálida y fría como el hielo irradiaba un gesto enternecedor, era su forma de decirme que no me preocupase, que estaba tranquila. 
Vi sus ojos, brillantes, eran preciosos. Ante ella, el fruto una vida de amor, el reflejo de un marido que no pudo llegar tan lejos. El final de una consumación que piadosamente deseaba en silencio desde que le perdió. 
Sentí en ese momento la mano de mi padre, una vez más, sobre mi hombro, explicándome del mismo modo y sin una palabra que era el momento de dejarla ir. Me levante, me di la vuelta y experimentando el mayor de los dolores que he conocido en la vida, le dije adiós a una de las pocas personas que llego a amar a alguien como yo.

Había vuelto al punto de partida, Margaret estaba en mi vida, pero eso no impedía que algunas veces un vació inmenso se apoderase de mi. La muerte de mis padres aunque trágica y dolorosa, no había sido fortuita, en ambos casos un indeseable había sido el causante principal de todo ese dolor. 
Al doctor Harold se le retiro la licencia, la gente del pueblo destrozo su casa, su coche, le pegaron una paliza y lo abandonaron a su suerte en una zona desértica en la que pudieron dar con el antes de morir deshidratado, para más tarde juzgarle por una larga cadena de delitos, entre los que se encontraba el homicidio imprudente.
Por otro lado, el hombre que mato a mi padre no era de Alamo, lo que no impidió que durante tres días nuestros cuerpos de seguridad locales se ensañen con el. Fue el propio detenido quien pidió juicio y se declaro culpable de todos los cargos.

Dos veces, el egoísmo y la maldad de las personas me habían arrebatado algo que era mio. 
Se me había negado la felicidad, se me había negado amor, cariño y en el proceso me habían arrebatado a mi familia. Poco a poco se fue formando una bola de rabia dentro de mi, que solo Margaret era capaz de aplacar.
Pero en fin, la vida aun siendo una mierda, no deja de ser vida. Te toca vivirla y cuando te golpea, solo puedes limpiarte el polvo y volver a la carga y así lo hicimos. Con 20 años y tras enterrar a Bella Mitman al lado de su amado, decidí que era el momento de dar el paso y formalizar mi relación con el amor de mi vida, así que le pedí matrimonio a Margaret, era la manera en la que sentí que podría calmar parte de mi dolor, era mi forma de agradecer a mis padres su dedicación durante tanto tiempo, con felicidad y amor antes que con pena y tristeza.
Y así fue como en Diciembre de 1984 Edmon Mitman paso a ser el esposo de Margaret Mitman. 

Los ochenta fueron una época increíble, vivimos el despertar musical del país, las innovaciones tecnológicas, conseguí mi propio taller cuando el viejo Mike se jubilo y me vendió su pequeña joya. Margaret paso a ser mi gerente de cuentas cuando las mujeres consiguieron establecer su posición en la que para el momento fue de las sociedades más machistas habidas y por haber de la época y entre los dos crecimos, nos hicimos mayores y disfrutamos de experiencias mágicas. 
Resulto ser una mujer de armas tomar, dura y fuerte. Nunca dejo que nadie le pusiese una mano encima, nunca nadie pudo desmerecer su trabajo. Siempre sabia que decir y siempre tenia razón. 
A veces cuando venia algún cliente y ella empezaba a discutir con alguno de los repartidores y predicadores de puerta y puerta que tenia la mala manía de asociar su genero a una venta o sermón asegurados, apostábamos a ver cuanto tiempo podía tardar en hacer que intentase huir despavoridos. Así era mi pequeña tigresa, feroz como ella sola. Y al final resulto que la mecánica y la soldadura se convirtieron en mis pasiones, la gran afición de Edmon Mitman era tumbarse en su carretilla y meterse debajo de algún camión que pudiese embadurnarle de aceite y grasa hasta las cejas, mientras soltaba alguna chispa por aquí y por allá.
Nada podía compararse a la sensación de saber que mis manos también podían arreglar algo y al final del día mi trabajo era honrado y ayuda a mis vecinos, de alguna forma les devolvía el favor que me hicieron cuando murió mi padre.

Mientras tanto, mi ahora esposa, me mantenía hermoso y bien alimentado. Tortitas recién hechas con sirope de arce y el expreso más delicioso al otro lado de la frontera. Si, las mayores debilidades y placeres de este hombre eran sencillas como la vida misma, tortitas y café recién hechos, no necesitaba más.  Fue bonito... mientras duro.
Los años pasaron y no lo hicieron en valde, seguíamos juntos, teníamos dinero ahorrado, el negocio seguía viento en popa, llegue a tener a dos muchachos empleados y habíamos reformado la casa que me vio nacer. Finalmente había encontrado paz, o eso pensaba yo. 
Cinco años Dr. Martins, hace cinco años que deje de creer que exista algo parecido a la "paz".

Era un Lunes como otro cualquiera, Margaret y yo nos habíamos levantado puntuales, como habitualmente solíamos hacer, nos vestimos, tomamos nuestro café recién hecho y dejamos la comodidad de nuestra casa para dirigirnos a nuestro taller. 
Recuerdo el olor a hierba recién cortada antes de entrar en el garaje principal, se me debía haber notado en la cara porque la señora Mitman me lanzo esa mirada, ya sabe lo que le digo, esa mirada que te envían las mujeres cuando creen que estas adorable... si hubiese sabido lo que ocurriría unas horas más tarde, quizás hubiese intentado ser más agradable o decirle antes lo mucho que me gustaba esa expresión y cuantisimo la quería...
Se nos había pasado la mañana volando, entre facturas y chispazos del soplete cortando barras metálicas para reforzar la estructura del tractor de Tom, el hombre que nos había dado esta ultima jornada había venido a ver los progresos del trabajo y a pagar el importe que ascendía a 1500$. 
Dadas las circunstancias y la buena relación con la comunidad de Alamo, Margaret quiso prepararnos unos cafés con tortitas, su especialidad, pero se había quedado sin leche, ingrediente principal de su platillo más famoso. Ese fue el momento en el que todo se torcio...
Tom insistía en irse, en no molestarnos, agradecía el gesto y aseguraba estar dispuesto a pasar por su café el día siguiente, pero yo insistí, una y otra vez insistí, dando por sentado que la aventura de mi esposa sería tan simple como lo habian sido todos estos años. Que equivocado estaba.
Margaret fue a la tienda de Abbeys, unas cuantas calles más abajo, es la tienda del barrio y nos conocemos desde hace muchos años. Todo tendría que ser sencillo, entrar, saludar, coger las cuatro cositas que le hacían falta y salir. Todo, tendría que ser sencillo... pero no lo fue. ¿Ha leído el informe doctor? porque me gustaría evitar tener que hablar de los detalles de como ocurrió. 
Han pasado cinco años desde el día en que todo se fue a la mierda y aún así no he terminado de procesar toda la información de ese día. No hay día que no rompa a llorar o me despierte sudando y gritando en medio de la noche. Me siento solo, abandonado y sin rumbo y siempre, absolutamente siempre tengo un dolor en el corazón que en el mejor de los casos es como mil alfileres clavándose a la vez.
¿Como se vuelve a ser el mismo cuando te arrebatan todo? Perdí a Margaret y con ella, todo. Ya no había nadie que me ayudase a recomponer los pedazos rotos de mi vida. Yo no era tan bueno con las facturas ni los números en el taller y termine teniendo que venderlo para afrontar los pagos y las deudas que empezaron a acumularse tras su perdida. 
Poco a poco empece a caer en una espiral destructiva, los días se convertían en noches, las noches en días sin nada en el medio.
Empece a desatender la casa, a mi mismo, mis obligaciones y al final me convertí en un viejo huraño. 
De esta parte en adelante el resto es historia que creo ya conoce, doctor.
Me diagnosticaron depresión, aislamiento y no se cuantas mierdas más. Me empastillaron como a un drogata cualquiera, las ultimas pastillas  casi me matan y para rematar todo este circulo vicioso de mierda resulta que me estoy volviendo un viejo loco al que a veces le dan ataques de ira porque su cabeza ya no puede distinguir bien las cosas.
No se cuantos años me quedan de vida pero me gustaría poder seguir recordando las cosas que me importan hasta que me muera. 

Como puede ver la historia de mi vida, no es impresionante, solo es una gran amalgama de dolor y perdida y unos cuantos partes médicos desalentadores que en fin, no pintan nada bien. 

El Psiquiatra que suscribe INFORMA:

Que, EDMON MITMAN de 55 años de edad, identificado con DNI Nº XXXXXXXXXX, con estudios secundarios completos, con domicilio en 221 Aaron Dr, Alamo, Tennessee 38001, EE. UU con historia clinica nº 74950 ha sido atendido en este centro de salud el día 16/10/2019 en el que ha sido entrevistado y evaluado de lo cual se deduce: 

Ser una persona ubicada en tiempo, espacio y persona, su pensamiento es coherente acorde a la realidad, su lenguaje es fluido, presente funciones mentales estables; no evidencia en el momento actual signos de alteración mental o episiodios de hiper agresividad. 

Se expide el presente informe psiquiatrico, a solicitud del interesado para fines que estime conveniente. 

                                              

                                                                                                                                                                                                                                   Northwest Tennesse, 16 de octubre del 2019.

 

Edmon ya había terminado de presentar sus alegaciones, había hablado con sus médicos y el resultado parecía ser el mismo de siempre. Sus arrebatos de ira, su cansancio y en general la mayor parte de sus problemas se debían a una vida sedentaria, llena de remordimientos y recuerdos dolorosos de los cuales no era capaz de desprenderse.
La perdida de su taller, no tener hijos o familia referida cercana tampoco ayudaba y el hombre se encerraba cada vez más en si mismo.
Justo cuando se estaba poniendo la chaqueta y se despedía del celador responsable de su cuidado durante su estancia el Doctor Martins, encargado su evaluación se acerco a Edmon para hablar con el.

-¡Señor  Edmon!-dijo Martins en un todo más alto de lo habitual para dirigirse a Edmon-. Espere, por favor.
-¿Que ocurre Doctor?- replico Edmon, sin prestar mucha atención al doctor mientras se abotonaba su chaqueta.
-Vera... no he podido evitar emocionarme con su historia y... me gustaría ayudarle a...- Antes de que Martins terminase su frase, Edmon se giro y le interrumpió calmado y en un tono bastante serio.
-Amigo, agradezco su interés y su preocupación, pero hoy por hoy lo único que podría ayudarme a ser otro tipo de persona es imposible. No se ofenda joven, pero pongo muy en duda que pueda ayudarme-dijo el anciano al mismo tiempo que alargaba su brazo para dar la mano del psiquiatra.
-Escucheme, solo sera un momento-Martins, miro directamente a los ojos a Edmon, mientras cogía su antebrazo y le apretaba con firmeza-. Tiene que escucharme, puede volver a ser la persona que siempre ha sido, no será fácil, no dejará de sufrir por las noches, pero podría aliviar parte de ese dolor.  Necesita cambiar de aires, necesita volver a recuperar su trabajo, hacer amigos, conocer gente, necesita volver a vivir señor Mitman y se que puede hacerlo-los ojos del chico desprendían una calor intenso y al mismo tiempo una tristeza conocida para el anciano.
-Dime muchacho-replico el Edmon mientras posaba su mano sobre la del chico-. Veo en tus ojos lo que has vivido, casi puedo sentirlo, tus palabras son sinceras y tus intenciones son buenas, pero no hay tiempo de descuento para alguien como yo- Tras esta replica, el hombre dio un paso adelante, miro al chico y tras unos segundos le abrazo con una sonrisa llena de ternura.
Sin mediar palabra y acto seguido el anciano, alzo los cuellos de su chaqueta, expiro aire caliente en sus manos y avanzo hasta la puerta de salida. 
Ya en la calle, Ed se dirigía ha uno de los taxis que esperaban fuera del centro. 
-Buenas noches-dijo el taxista al ver al hombre acercarse con decisión al coche.
-Hola-respondió Edmon-.¿Podría llevarme? Vivo en el 221 de Aaron Dr.
El taxista asintió y se acerco a su cliente para ayudarle abriéndole la puerta. Justo en ese momento y cuando Edmon ya se encontraba con medio cuerpo dentro del vehículo, una voz sonó a lo lejos. 
-¡SEÑOR MITMAN!-era el Dr.Martins que venia corriendo y gritando, agitando sus brazos desde la entrada del centro medico. 
-¿Que ocurre?-dijo Ed mientras volvía a salir del vehículo y con un marcado gesto de sorpresa en su cara.
-¡Señor Mitman!-dijo Martins mientras trataba de respirar, agitado por la carrera-.Mire, yo no me rindo con usted, igual que otros no se rindieron conmigo, no puedo ofrecerle mucho pero... creo que esto le vendría bien.
El doctor le dio un sobre a Edmon, un sobre cerrado con su nombre, no se podía ver el interior pero se notaba apretado y ciertamente hinchado. 
-Chico, ya te he dicho que...-Antes de terminar la frase, el doctor abrazo a Ed dejandole sin palabras y acto seguido empezó a irse marcha atrás, mientras se emocionaba y sonreía.
-Hagame caso, señor Mitman, no se rinda-el joven doctor, termino su frase mientras se acercaba a la puerta exterior del centro y esta se abria. Ed no podía entender que estaba pasando, pero ante la insistencia del taxista que empezaba a impacientarse, entro en el coche y volvió a su hogar, sin apartar la vista del centro psiquiátrico y del sobre cuando este ya no estaba a la vista.

Media hora más tarde Ed ya estaba en su casa, se había duchado y se disponia a calentar un bote de conserva cuando sus ojos se clavaron en el sobre que el Dr le había entregado. 
El hombre abrió el sobre, dentro encontró 2000 dolares, varios destinos marcados en un pequeño mapa de bolsillo y una nota escrita y firmada por Martins que decía lo siguiente:
"Señor Mitman, no sabría explicarle muy bien como ni porque, sencillamente creo que merece algo mejor y estoy convencido de que tiene la fuerza necesaria para luchar por lo que merece, piense en Margaret y encontrara las respuestas, espero que el contenido del sobre le ayude y si no, bueno, recuerde que aún hay esperanza" 

Ese fue el ultimo día que se vio a Edmon visitar el cementerio, no hubo despedidas, no hubo abrazos ni risas, solo una sombra que dejo atrás Alamo. Algunos vecinos extrañados, buscaron al hombre, junto con las autoridades entraron en su casa, todo estaba recogido, como si en realidad nunca nadie hubiese abandonado aquellas habitaciones. 
Buscaron por todo el pueblo y no encontraron nada. Cuando porfin decidieron buscar algún signo de Edmon en el cementerio dieron con una pequeña nota y un ramo de flores con las alianzas de los Mitman. 
"Margaret, siempre has estado ahí en los momentos difíciles, siempre me has enseñado que la vida tiene que exprimirse cada día, con pequeños gestos, con pequeñas acciones que hacen un gran total. Tus ojos me han enseñado tanto que ninguna vida podría agradecerte todo cuanto mereces y si fuese posible me hubiese cambiado por ti sin dudarlo, pero se que eso no es lo que querrías. Se que detestarías el hombre en el que me he convertido...
Pero porfin he descubierto la respuesta, toda mi vida he tenido que afrontar situaciones difíciles y creo que a tu lado entendí que esas desgracias encerraban un propósito mayor. 
Voy a demostrarte que me has enseñado bien, pero no puedo hacerlo en Alamo, todo aquí hace daño.
Conocí a un doctor que me recordó mucho a ese joven que una vez fue feliz, me ha aconsejado que intente reabrir mi taller, que vuelva a trabajar, a conocer a otras personas y que busque retos. Me envío un mapa con destinos entre los que se encuentran Los Santos, he visto que ahí hay algunos de los mejores talleres que uno puede encontrar y creo que es el momento de seguir adelante. No, es un adiós, te llevo conmigo y por ello dejo escritas en esta nota mis palabras, para que me disculpes por no volver a este lugar, por favor si tienes oportunidad discúlpate de mi parte con mis padres, estoy convencido de que ellos lo entenderán. Siempre te he amado, te amo y te amare. Hasta pronto"

De esta forma, Edmon Mitman partió hacia un nuevo futuro que aun... esta por contar.

Cualquier cosa que quieras añadir (Opcional): Gracias por vuestro tiempo. 

Editado 28 de Octubre del 2019 por Stillone

[jvier00]

Lo primero de todo debo de felicitarte por la pedazo de historia que has publicado, es la primera vez que veo una historia tannnnn larga. ¡Enhorabuena!

 

Tu invitación ha sido aceptada. Te recomiendo leer la NORMATIVA a conciencia y comprenderla bien antes de pasar a hacer el examen oral.

También te dejo dos post muy útiles sobre COMANDOS /ME Y /DO y ROL DE ENTORNO

 

Ya puedes acceder al TS3 (ts3.despistaos.es) para realizar el examen.

 

Aquí tienes los horarios de entrevistas, puedes escoger el que mejor te venga: HorarioEntrevistas

 

Cualquier duda, puedes preguntarla en las salas de ayudas en nuestro servidor TeamSpeak3.

 

¡Mucha suerte @Stillone!

 

[1_Sasha_5]

ENTREVISTA ORAL APROBADA
 

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¡Enhorabuena ya puede acceder a la ciudad!

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Te dejo un par de guías por si te surge cualquier duda. Cualquier duda me comentas.

 

[GUÍA] - Todo sobre el servidor

[MOD] Mejora Visual y MiniMapa

Normativa General

 

**La normativa está sujeta a cambios constantes**

 

¡¡Que disfrutes la experiencia, @Stillone!

[Reskar]

El usuario @ Stillone  debe realizar una rewhitelist debido a su inactividad en el servidor. Tienes x dias a partir de la fecha 18/4/2020 para realizarla, pasado ese plazo pierdes tu derecho de rewhitelist. 

 

Debido a percances del usuario se extiende el periodo indefinidamente hasta la solución de los mismos.

Editado 30 de Abril del 2020 por Reskar

[Manukun]

Muevo el tema a rechazados, dado que no ha habido actividad durante los últimos 15 días.

Para reactivarla contactar por mensaje conmigo.

@ Stillone  @ StelloneTM

Cualquier duda puedes mandarme un mensaje

[Lil z1sor]

ENTREVISTA ORAL APROBADA

 

Enhorabuena por tu reciente acceso al servidor @ Stillone  con la ID: 14570

 

Te voy a dejar por aquí varios enlaces de interés para que puedas echar un vistazo desde ya, para empezar de la mejor manera posible tu vida en Despistaos.

 

 

[CONFIGURACIÓN] - Voz, Gráficos, Sonido y Bindings

[GUÍA] - Todo sobre el servidor

[MOD] Mejora Visual y MiniMapa

Normativa General

 

***La normativa está sujeta a cambios constantes, así que pásate de vez en cuando para darle un repaso a las nuevas normas o a sus actualizaciones.***

 

"Porque despistao se nace, no se hace"