Nombre y Apellidos ingame: Wang Kim Brong
Edad y fecha de nacimiento (REAL): 24 años, 17/01/1995
Experiencia previa en roleplay: He jugado en 2 servidores distintos de GTA V con distintos roles: ciudadano y mafia. El tiempo total jugando habrá sido de unos 3 meses.
Historia completa de tu personaje: Shanghái, año 1992, la madre de Wang que está a punto de dar a luz al pequeño, deambula por el barrio en busca de ayuda, aunque la mayoría de la gente se encuentra reacia debido a que saben que es una prostituta. Pasadas unas horas la madre rompe aguas en mitad de la calle y se apoya en una pared para dejarse caer poco a poco en el suelo con la gran fortuna de que pasaba por allí uno de los agentes de policía asignados para hacer la ronda. El policía al ver esto se acerca inmediatamente para ayudar a la mujer y poder llevarla a un hospital, o en su defecto, a un sitio más o menos esterilizado con alguna matrona que pueda llevar el parto como es debido.
Una vez habiendo encontrado una matrona que pudiera llevar el parto en la casa de la misma después de unas arduas 3 horas nace el pequeño Wang, aunque para sorpresa de todos nace sin llorar. Pasadas unas horas y con la situación ahora bien tranquila y sin sobresaltos la madre de Wang y la matrona tienen una conversación en la que la madre cuenta que ella nunca quiso tener al bebé, que sólo es un error de su trabajo y que tiene pensado abandonarlo porque con él ningún cliente querrá acercarse. Al oír esto la matrona la intenta convencer de que hay más posibilidades y opciones de ganarse la vida, pero la mujer no entra a razones, así que después de intentar pensar en alguna solución la matrona decide que llevará al pequeño a un orfanato para que sea criado.
A la edad de 12 años, Wang tendría una idea rondándole la cabeza: escaparse del orfanato. Aunque había sido feliz durante todo este tiempo en el orfanato estando rodeado de sus amigos, que para él eran todos los que pasaban por allí fuera duradera o no su estancia ya que los consideraba su familia al sufrir la misma suerte que él, no hacía nada más que pensar en las palabras que le dijo una de las chicas que pasó por allí “En tus ojos veo ganas de venganza por cómo te ha tratado el mundo pero no para hacer el mal, sino el bien.”. Cada vez que pensaba en ello maldecía que aquella chica que nunca pudo conocer se hubiese quedado más tiempo de una semana, se preguntaba a qué se refería o qué estaba intentando decirle y más de una vez sentía las ganas de salir de aquel orfanato ya que sólo conocía lo que había dentro de esas 4 paredes y nada del mundo exterior… aunque años más tardes daría con la clave.
Wang, a quien siempre le ha gustado hacer reír a sus compañeros porque para él es algo muy gratificante y aunque se encuentre en horas bajas siempre es capaz de sonreírle al mundo, decidió interpretar una obra de teatro dentro del orfanato con ayuda de los tutores que llevaban el mismo. La obra que les propondría a éstos sería Robin Hood ya que le gustaba mucho el sentido del humor del personaje y veía interesante el tema qué trata. Habiendo aceptado su propuesta y habiéndole tocado el papel de Robin Hood en el reparto, cogió el guion; que buenamente pudieron hacer los tutores; para aprendérselo de cara a la presentación de la obra que sería en unas semanas.
Una vez todo preparado, acompañado de sus amigos y subidos todos al “escenario” improvisado en el pequeño jardín del orfanato se puso en marcha la representación más reveladora que había tenido lugar hasta la fecha y la cual daría lugar a un ladronzuelo bastante peculiar. Wang justo cuando está interpretando la parte donde le roban al rey para entregárselo a los pueblerinos más pobres se da cuenta de que es algo que le llena, es algo que hace que se sienta bien y que la adrenalina que sufre en el momento en el que está robando, aunque sea una interpretación, le gusta mucho y en ese momento cae en la cuenta de que a eso es a lo que se pudo referir aquella chica con las palabras que le dijo.
Habiendo finalizado la obra con una gran cantidad de aplausos de sus compañeros y tutores y después de cenar todos se dirigen a sus dormitorios. Wang quien estaba bastante callado para su personalidad empezó a querer marcharse de allí para poder volver a sentir lo que había sentido en la obra y descubrió que esa es su verdadera vocación y lo que llena, robar a los que más tienen para dárselo a los pobres con una sonrisa y de alguna manera así evitar que el resto de personas desafortunadas pasen por malas situaciones como podría ser la suya. Triste pero feliz, cerró los ojos y se fue a dormir pensando en que como mucho sólo le quedaban como mucho 2 años más allí, pues cumpliría la mayoría de edad y no podría quedarse por mucho más tiempo.
En el año 2010, Wang abandonó el orfanato despidiéndose emotivamente tanto de sus compañeros como de los tutores pues sabía que, aunque había sido abandonado por su madre había tenido los mejores años que podía haber imaginado y encima rodeado de muchas personas con las que había compartido todo.
Pasados unos años ganándose la vida haciendo lo que más le gustaba y teniendo en su haber una lista de varios robos, decidió intentar robar a una de las familias más ricas que conocía por aquel entonces ya que buscaba un objetivo mayor; robarles a los ladrones que robaban para devolverlo a sus dueños a cambio de una recompensa equitativa se le quedaba pequeño. Así que una vez ideado un “buen” plan (siempre había algo que se le escapaba) decidió entrar en la casa por la noche. Estando ya dentro de la casa con un buen saco que llenar de cosas de valor empezó a coger todo aquello que le parecía muy caro sin hacer mucho ruido para no despertar a la familia que vivía allí. Dispuesto a salir de allí por donde había entrado, tiró una tirolina con ayuda de un arco atando una cuerda gruesa a la flecha, no antes sin dejar una nota agradeciéndole por el botín firmada con el sobrenombre de Robin Hood. Una vez estando a mitad de la tirolina casera creada por él se dio cuenta de que quizás había cargado demasiado aquel sacó y empezó a romperse un poco dejando caer algunas cosas.
Después de aquel imprevisto y estando ya en la que el denominaba “guarida” donde escondía todo cuanto robaba empezó a empaquetar cosas del botín robado en bolsas pequeñas atadas con una cuerda como si fuesen sacos pequeños. Una vez teniendo atados todos los sacos el primer lugar que visitó fue el orfanato donde tuvo una “pequeña” charla.
Una vez el orfanato vestido de manera peculiar llamó a la puerta abriéndole una de sus tutoras. Wang, o en este caso Robin Hood, le dio varias bolsas que contenían varias cosas de valor para que así los niños del orfanato pudiesen llevar una mejor vida. La tutora sorprendida le dijo “¿Wang de dónde has sacado todo esto?” a lo que Wang se quedó boquiabierto ya que llevaba un “gran disfraz”. Habiendo entrado dentro del orfanato para hablar con la tutora y explicarle lo que había estado haciendo durante estos años desde que dejó el orfanato ésta le da las gracias por haber ido dejándoles dinero para que los pequeños puedan tener una mejor vida aunque con cara triste le advierte de que a quien ha robado es parte del ejército y que le recomienda que con lo que haya conseguido abandone el país y busque otro ya que si le pillan podían incluso condenarle a muerte. Wang al escuchar esto y quedarse medio pálido le dice que tomará su consejo puesto que siempre le habían ayudado mucho y que irá a ver si tiene lo suficiente como para empezar una nueva vida en otro lugar y que si no a su pesar le tendrá que pedir que le dé algo de lo que le había llevado esa misma noche.
Una vez en su “guarida” y habiendo contando todo lo que tiene, junto con ayuda de su tutora se dispone a elegir un nuevo destino. A Wang siempre le ha llamado la atención los sitios con mucha gente ya que cuánto más gente haya más oportunidades tiene para hacer eso que tanto le gusta y tiene menos riesgo de que lo reconozcan.
A la edad de 27 años, Wang se dispone a embarcar en el avión que lo llevará a su nuevo destino donde comenzará una nueva vida desde cero y donde volverá a ejercer la justicia a su manera.
Ambiciones: Su principal ambición es intentar ayudar a la gente y que la gente hable de sus hazañas.
Miedos: Teme que su identidad de “justiciero” salga a la luz porque piensa que nadie le creería.
Rasgos positivos: Wang es risueño, le gusta tender la mano a aquellas personas que lo necesiten de verdad, está dispuesto a meterse en cualquier tipo de trabajo que siga sus principios siempre y cuando le reporte beneficio.
Rasgos negativos: Wang es bastante ingenuo pues no ha tenido amistades desde que dejó el orfanato y cualquiera podría acercarse a él sin que en primera instancia sospechase de si va con segundas intenciones o no.
Rasgos neutros: Wang no es violento porque nunca lo ha necesitado, pero si tuviese que serlo en alguna situación que lo requiriese no dudaría en usar la violencia para ponerse a salvo tanto a él como a quien vea que necesita ayuda.
