Invitación - Fontyf

[Patri]

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https://despistaos.es/profile/5586-fontyf/

[Marcrisale]

PDT: Contesto yo por imposibilidad del usuario debido a un problema.
Nací y crecí en un barrio humilde a las afueras de Madrid, más concretamente en Vallecas, allá por los 90. Mi nombre es Manolo Rivas y esta es mi historia.
Barrio conflictivo, lleno de sucesos paranormales, ventas de drogas y asesinatos inexplicables que acontecían nuestros ojos diariamente. Recuerdo perfectamente dicha época, los trabajadores llegaban a su casa andrajosos, llenos de yeso, polvo y la cara manchada en muchos casos de hollín de las minas de Chamberí… 
Mi padre trabajaba en la construcción. Recuerdo perfectamente las pisadas de mi padre entrando por la puerta de casa, chapoteando debido al barro que llevaba en sus suelas, acompañado de los gritos de mi madre: 
—    Federico. ¡Quítate los zapatos antes de entrar en casa, la cena ya está lista!
El olor a sudor inundaba todo el comedor y los restos de polvo flotaban por el ambiente, dejándolo blanco al paso de él.
Mi madre se dedicaba a coser botones y remendar prenda de ropa de las señoras de otros barrios, su sueño frustrado era abrir una mercería y arreglos de ropa en el barrio, nunca tuvo el dinero necesario para elaborar su sueño.
El único recuerdo que tengo actualmente de ella, y que recordaré toda mi vida, es el levantarme los días que yo no tenía que ir al colegio. Ella siempre me despertaba con un beso en la frente y levantando la persiana de mi cuarto. Unos pequeños rayos de luz entraban por la rendija de la persiana, siempre recordaré el olor de ella a jazmín y lila recién cortado, os preguntareis como lo recuerdo, pues la respuesta es mi obvia, mis padres tenían una casa en un pueblo de Madrid, exactamente en el Molar, ya sabréis más acerca de esta casita más adelante, continuemos…
Allá por el 95 sucedió un acontecimiento que dejó marcado a todo Vallecas: E.T.A.
Según las noticias dos etarras de un comando de Madrid se encargaron de vigilar y anotar los movimientos de una furgoneta en la que se desplazaría dos víctimas en aquel atentado, ellas fueron las encargadas de accionar el mecanismo explosivo por radio control en el que todos sus ocupantes fallecieron y otras cuarenta y cuatro resultaron heridas por el perímetro del explosivo, una de ellas fue mi madre.
Ella se dirigía a comprar hilos a la mercería “El Capricho” en aquel trágico once de diciembre a las 14:15 de la tarde, pero jamás llego a su destino.
Ese once de diciembre alrededor de las 5:30 de la tarde llamaron al teléfono fijo de casa del hospital. Contestó mi padre, ya que yo por esa fecha no rondaba los cinco años de edad. Su cara quedó pálida al descolgar el teléfono, mi madre se encontraba en el hospital en estado de gravedad debido a la onda expansiva que provocó dicha explosión.
Ella murió, el quince de diciembre de 1995 debido a la explosión restos de chapa del vehículo impactaron sobre su cuerpo. Uno de esos restos llegó a su pulmón perforándolo y dejando que se desangrara hasta que su cuerpo dejara de respirar por sí solo.
Al morir mi madre decidimos mudarnos a “El Molar”, aquella casita de pueblo de la que hablé anteriormente. Nos mudamos de Vallecas, ya que todo nos recordaba a ella.
Los años pasaron como gotas de agua fría, nunca pudimos superar la muerte de mi madre. Mi padre comenzó a faltar al trabajo, el dinero no llegaba a casa, empezó a beber y a consumir drogas. 
Empecé a trabajar de aprendiz con catorce años en un taller amigo de mis padres, los tractores que utilizaban los granjeros para cultivar los campos que entonces había, de esa manera podía mantener el piso a duras penas que todavía conservábamos en Vallecas.
Con dieciséis años, no aguantaba más la situación con mi padre, su manera de autodestruirse era superior a mis fuerzas, y decidí volver a donde comenzó todo, a Vallecas. Encontré trabajo de mecánico, rondaba el año 2006 y el dinero en los hogares entraba a raudales, ¿La fuente?, la droga.
Adquirí los conocimientos necesarios para estudiar mecánico en un reconocido instituto de Vallecas, donde logré sacarme un título con los conocimientos que había adquirido, nunca dejé de trabajar y formarme como mecánico, pero mi economía no me permitía vivir cómodamente, fue entonces cuando conocí a “El Chivi”. A menudo traía su Mercedes al taller, con el paso del tiempo comenzamos a entablar una amistad, que terminó en algo más… empresarial.
Mi economía comenzó a crecer. El dinero entraba en casa, me permití adquirir un coche de alta gama, una reforma en casa con las mayores calidades de la época. Fue entonces cuando a Chivi le pillaron con un cargamento de sustancias ilegales, le cayeron 30 años de prisión. Le pillaron por mi culpa, en una transacción, era yo el encargado de realizarla ya que nos encontrábamos en su casa. Él depositó en mi toda la confianza para realizarla. Fue entonces cuando la policía entró por la puerta. Debido al pánico que me entró al pensar en una condena o en el simple hecho de entrar en prisión… Fue cuando decidí correr, la ventana de la casa del Chivi daba a un pequeño jardín, era un primero. Salté por la ventana, mientras la policía registraba y detenía a todos los integrantes de la reunión, logré esconderme dentro de un portal. Atemorizado subí al piso más alto del edificio y logré esconderme…
Al poco tiempo recibí una carta del Chivi amenazante, había tramitado mi liquidación… Tenía la sentencia firmada. Con la carta en la mano arrugada, debido a la ira, me senté en el sofá e intenté tranquilizarme. De fondo sonaba la radio, en ella, un anuncio que decía:
—    Los Santos Resort, disfruta de sus maravillosos paisajes en una ciudad tropical, acompañada por un clima tropical en el sur y si busca algo más árido lo encontrará en el norte. Disfrute de sus campos de golf, clubs nocturnos acompañados de un fantástico casino.
De repente seguido de escuchar el anuncio en la radio, el teléfono sonó, eran del hospital, mi padre había fallecido de una sobredosis.
Era mi oportunidad para escapar, ya nada me unía a España. Me cambié de ropa, poniéndome mi chándal de Adidas y una mochila negra donde guardé un par de mudas. Levanté una baldosa del baño donde guardaba el dinero que había recaudado con Chivi… Llamé a un taxi el cual me acercó al aeropuerto de Barajas, donde tramité todos los papeles y adquirí el billete a “LOS SANTOS”.

[Lil z1sor]

                                          SOLICITUD EN REVISIÓN                                     

 

Solicitud en revisión. El usuario deberá comunicarse conmigo via MD para aclarar unos detalles respecto al tema en cuestión.

[Lil z1sor]

          PADRINO APTO        

 

Recuerda @ Patri  que en el caso de que tu APADRINADO pasase la WHITELIST, eres el encargado de guiarlo en el servidor durante sus inicios, como recoge la normativa.

 

El usuario @ Fontyf  puede continuar con el proceso.

[Fontyf]

Nombre del personaje: Manolo Rivas

Lugar de nacimiento: Madrid

Fecha de nacimiento: 27/01/1990 Edad: 30

Experiencia: Arma3 Altis Life durante un año en el servidor PoP Lfie, GTAVRP varios servidores sin whitelist aunque sigo la comunidad de Despistaos aproximadamente 2 años

 

Nací y crecí en un barrio humilde a las afueras de Madrid, más concretamente en Vallecas, allá por los 90. Mi nombre es Manolo Rivas y esta es mi historia.
Barrio conflictivo, lleno de sucesos paranormales, ventas de drogas y asesinatos inexplicables que acontecían nuestros ojos diariamente. Recuerdo perfectamente dicha época, los trabajadores llegaban a su casa andrajosos, llenos de yeso, polvo y la cara manchada en muchos casos de hollín de las minas de Chamberí… 
Mi padre trabajaba en la construcción. Recuerdo perfectamente las pisadas de mi padre entrando por la puerta de casa, chapoteando debido al barro que llevaba en sus suelas, acompañado de los gritos de mi madre: 
—    Federico. ¡Quítate los zapatos antes de entrar en casa, la cena ya está lista!
El olor a sudor inundaba todo el comedor y los restos de polvo flotaban por el ambiente, dejándolo blanco al paso de él.
Mi madre se dedicaba a coser botones y remendar prenda de ropa de las señoras de otros barrios, su sueño frustrado era abrir una mercería y arreglos de ropa en el barrio, nunca tuvo el dinero necesario para elaborar su sueño.
El único recuerdo que tengo actualmente de ella, y que recordaré toda mi vida, es el levantarme los días que yo no tenía que ir al colegio. Ella siempre me despertaba con un beso en la frente y levantando la persiana de mi cuarto. Unos pequeños rayos de luz entraban por la rendija de la persiana, siempre recordaré el olor de ella a jazmín y lila recién cortado, os preguntareis como lo recuerdo, pues la respuesta es mi obvia, mis padres tenían una casa en un pueblo de Madrid, exactamente en el Molar, ya sabréis más acerca de esta casita más adelante, continuemos…
Allá por el 95 sucedió un acontecimiento que dejó marcado a todo Vallecas: E.T.A.
Según las noticias dos etarras de un comando de Madrid se encargaron de vigilar y anotar los movimientos de una furgoneta en la que se desplazaría dos víctimas en aquel atentado, ellas fueron las encargadas de accionar el mecanismo explosivo por radio control en el que todos sus ocupantes fallecieron y otras cuarenta y cuatro resultaron heridas por el perímetro del explosivo, una de ellas fue mi madre.
Ella se dirigía a comprar hilos a la mercería “El Capricho” en aquel trágico once de diciembre a las 14:15 de la tarde, pero jamás llego a su destino.
Ese once de diciembre alrededor de las 5:30 de la tarde llamaron al teléfono fijo de casa del hospital. Contestó mi padre, ya que yo por esa fecha no rondaba los cinco años de edad. Su cara quedó pálida al descolgar el teléfono, mi madre se encontraba en el hospital en estado de gravedad debido a la onda expansiva que provocó dicha explosión.
Ella murió, el quince de diciembre de 1995 debido a la explosión restos de chapa del vehículo impactaron sobre su cuerpo. Uno de esos restos llegó a su pulmón perforándolo y dejando que se desangrara hasta que su cuerpo dejara de respirar por sí solo.
Al morir mi madre decidimos mudarnos a “El Molar”, aquella casita de pueblo de la que hablé anteriormente. Nos mudamos de Vallecas, ya que todo nos recordaba a ella.
Los años pasaron como gotas de agua fría, nunca pudimos superar la muerte de mi madre. Mi padre comenzó a faltar al trabajo, el dinero no llegaba a casa, empezó a beber y a consumir drogas. 
Empecé a trabajar de aprendiz con catorce años en un taller amigo de mis padres, los tractores que utilizaban los granjeros para cultivar los campos que entonces había, de esa manera podía mantener el piso a duras penas que todavía conservábamos en Vallecas.
Con dieciséis años, no aguantaba más la situación con mi padre, su manera de autodestruirse era superior a mis fuerzas, y decidí volver a donde comenzó todo, a Vallecas. Encontré trabajo de mecánico, rondaba el año 2006 y el dinero en los hogares entraba a raudales, ¿La fuente?, la droga.
Adquirí los conocimientos necesarios para estudiar mecánico en un reconocido instituto de Vallecas, donde logré sacarme un título con los conocimientos que había adquirido, nunca dejé de trabajar y formarme como mecánico, pero mi economía no me permitía vivir cómodamente, fue entonces cuando conocí a “El Chivi”. A menudo traía su Mercedes al taller, con el paso del tiempo comenzamos a entablar una amistad, que terminó en algo más… empresarial.
Mi economía comenzó a crecer. El dinero entraba en casa, me permití adquirir un coche de alta gama, una reforma en casa con las mayores calidades de la época. Fue entonces cuando a Chivi le pillaron con un cargamento de sustancias ilegales, le cayeron 30 años de prisión. Le pillaron por mi culpa, en una transacción, era yo el encargado de realizarla ya que nos encontrábamos en su casa. Él depositó en mi toda la confianza para realizarla. Fue entonces cuando la policía entró por la puerta. Debido al pánico que me entró al pensar en una condena o en el simple hecho de entrar en prisión… Fue cuando decidí correr, la ventana de la casa del Chivi daba a un pequeño jardín, era un primero. Salté por la ventana, mientras la policía registraba y detenía a todos los integrantes de la reunión, logré esconderme dentro de un portal. Atemorizado subí al piso más alto del edificio y logré esconderme…
Al poco tiempo recibí una carta del Chivi amenazante, había tramitado mi liquidación… Tenía la sentencia firmada. Con la carta en la mano arrugada, debido a la ira, me senté en el sofá e intenté tranquilizarme. De fondo sonaba la radio, en ella, un anuncio que decía:
—    Los Santos Resort, disfruta de sus maravillosos paisajes en una ciudad tropical, acompañada por un clima tropical en el sur y si busca algo más árido lo encontrará en el norte. Disfrute de sus campos de golf, clubs nocturnos acompañados de un fantástico casino.
De repente seguido de escuchar el anuncio en la radio, el teléfono sonó, eran del hospital, mi padre había fallecido de una sobredosis.
Era mi oportunidad para escapar, ya nada me unía a España. Me cambié de ropa, poniéndome mi chándal de Adidas y una mochila negra donde guardé un par de mudas. Levanté una baldosa del baño donde guardaba el dinero que había recaudado con Chivi… Llamé a un taxi el cual me acercó al aeropuerto de Barajas, donde tramité todos los papeles y adquirí el billete a “LOS SANTOS”.

 

Aspiraciones de Manolo Rivas:
En principio conseguir el puesto de mecánico y poco a poco llegar a ser el jefe de mecánicos o tener su propio taller, ya que ese es su sueño.  ¿Lo conseguirá?

Estilo de vida:
Normal y sencillo. Un ciudadano más que lo único que quiere es ganarse la vida para poder sobrevivir. Ya que aprendió a las malas que los lujos no están en su destino y menos por la vía rápida.

Primeros objetivos: 
Olvidarse de su anterior vida y comenzar una nueva, pero esta vez haciéndolo por la vía legal, aunque nunca se sabe… Dicen que siempre se recae. 
Aunque su mayor miedo es que lo encuentre “el Chivi”, espera no volver a encontrárselo nunca más y de hecho eso es lo que le llevó a tomar la decisión de cambiarse de ciudad y empezar una nueva vida.

[Fran]

Tu invitación ha sido ACEPTADA. Te recomiendo leer la NORMATIVA a conciencia y comprenderla bien antes de pasar a hacer el examen oral.

También te dejo dos post muy útiles sobre COMANDOS /ME Y /DO y ROL DE ENTORNO

 

Ya puedes acceder al TS3 (ts3.despistaos.es) para realizar el examen.

 

Aquí tienes los horarios de entrevistas, puedes escoger el que mejor te venga: HorarioEntrevistas

 

Cualquier duda, puedes preguntarla en las salas de ayudas en nuestro servidor TeamSpeak3.

 

¡Mucha suerte @ Fontyf !

[Canaviis]

ENTREVISTA ORAL APROBADA
 

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¡Felicidades! Ya puedes entrar al servidor 

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Te dejo por aquí todos los enlaces que podrían serte de utilidad antes empezar a jugar. ¡Bienvenid@ a Despistaos!
 
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